ANÁLISIS DEL LIBRO LOS CUATRO ACUERDOS DE MIGUEL RUIZ

El libro “Los cuatro acuerdos”, es una herramienta bastante útil en un proceso de coaching, ya que lleva a la persona a liberar su máximo potencial y a desarrollar la coherencia, la influencia y la inspiración de la que tanto se habla en dicho proceso.

La coherencia a la hora de ser impecable con las palabras y ser uno sólo en cuanto a lo que se dice y lo que se piensa, realizando siempre un proceso de análisis antes de hablar, siendo consientes que ejercemos un poder de influencia sobre quien escuche nuestras palabras.

El no tomarse nada personal nos permite entender que cada persona lleva su propio proceso y que sus reacciones y formas de existir son producto de su sistema de creencias y no tienen nada que ver con nosotros. Viéndolo desde este observador, podremos ser mejores coaches porque nos centraremos en las causas de las acciones de nuestros coachees y no nos afectará la forma en la que ellos se comporten. Seremos neutros y pacientes y haremos un mejor trabajo de acompañamiento.

El no emitir juicios, es algo que debemos tener muy arraigado a nuestro sistema de creencias, ya que además de ser algo que solemos hacer muy a menudo, es una barrera entre el coach y el coachee, ya que nos desvía de la realidad de la situación que se esté tratando y damos espacio a nuestra mente para que divague en sus propios pensamientos. Cuando no emitimos juicios, sino que validamos inmediatamente lo que creemos de alguien con esa persona, no idealizamos ni mezclamos la realidad con nuestras creencias, sino que somos exactos y precisos sobre la imagen que nos forjamos de algo o alguien; rompemos esa barrera o esa bruma que nos impide ver las cosas tal como son.

Por último, el hacer siempre nuestro mayor esfuerzo es lo que nos va a permitir liberar nuestro máximo potencial. Aún cuando nuestros resultados no sean los que esperábamos, si damos todo de nosotros nos sentiremos realizados y felices porque sabremos que no pudimos hacerlo mejor y de esto se trata el coaching; de potenciar nuestra energía y nuestro poder para llevarlo cada vez más alto y alcanzar la cima del éxito.

Definitivamente, es un libro extremadamente aplicable en un proceso de coaching y en la vida diaria. Cumplir con estos acuerdos nos permitirá alcanzar el cielo en la tierra y vivir en paz y armonía con nosotros mismos y con los demás.

El primer acuerdo tiene un gran impacto en los procesos de coaching. El ser impecable con nuestras palabras es la base de este proceso, no se puede ser un buen coach sin cuidar lo que se está diciendo, porque además de estarnos representando con cada palabra que expresemos, estamos influyendo de una u otra manera sobre quien está escuchándonos. Ser conscientes de nuestras palabras y cuidar que estas sean impecables cambiará nuestro entorno por completo.

Para asegurar que no queden espacios para suposiciones es necesario validar siempre la información. No tener miedo de preguntar y confirmar si lo que pienso es cierto o no. Ser consciente de cuando esté emitiendo un juicio y cambiarlo inmediatamente. No dar nada por sentado y ser preciso y coherente entre lo que sé de una persona y lo que pienso de ella.

Sabes que estás haciendo lo máximo que puedes, cuando entregas todo de ti y te esfuerzas por ser excelente en lo que haces. Cuando sientes que no pudiste haberlo hecho mejor y te sientes satisfecho contigo mismo.

Para que sucedan cosas maravillosas debes estar abierto al cambio y a la vida. Reinventarte constantemente y vivir con los brazos abiertos para recibir cualquier cosa que la vida ponga en tu camino. Cumplir con estos cuatro acuerdos y auto-evaluarte día a día, retarte y exigirte, concentrándote en ti y en tu proceso y dejando de observar y/o juzgar el de los demás.

Si observas con los ojos del amor, podrás ver las maravillas que tiene el mundo, desarrollar compasión por los seres humanos, entenderlos y entender el porqué de sus actos. Podrás ver magia en cada situación y en cada persona. Podrás ver la luz que esconde cada uno y te centrarás mucho más en las cualidades que en los defectos.

Para poder encontrar tu verdadera felicidad, comprométete a desaprender todas aquellas creencias y a romper todos aquellos acuerdos que a lo largo de tu vida te has impuesto.

A desprenderte de todo aquello que no te permita avanzar, ni ver con los ojos del amor. A dar siempre lo mejor de ti y ver siempre lo mejor en las personas desinteresadamente.

Deja de preocuparte por los demás o por lo que los demás piensen de ti y alimenta tu alma y tu imagen propia diariamente.

Avanza en tu conexión espiritual respetando cada forma de vida existente, meditando y encontrándote contigo mismo todos los días. Pensando positivo y anulando pensamientos que te envenenen y te frenen en tu camino hacia el éxito.

Amando la vida y todo lo que hay en ella, tratando de conectarte contigo y con todo lo que te rodea de la manera más pura y genuina. Convenciéndote de que eres feliz , de que eres amor y que eres luz y estás aquí para iluminar todo lo que se acerque a ti con tu fuego interior.